THROWBACK CON BROKEN WINDOW!!
Era viernes y uno de los lugares obligados para
pasar una buena noche de toquín es claramente Cactux, el lugar de la cerveza
artesanal y de los mejores nachos de la ciudad.
El ambiente se sentía tranquilo y amigable,
cuando entras al recibidor lleno de sillones viejos e imágenes te puedes sentir
como en tu segunda casa.
La inocente incredulidad de la gente por llegar
temprano y verse en la situación de esperar una hora más para que comience el
toquín, los hace crear el ambiente a través de unas cuantas chelas y pláticas
ambiguas.
La gente se acumulaba para entrar por esa
angosta puerta y tras un inesperado cover de veinte pesos, los grupitos
nostálgicos se adueñaban de las mesas.
El soundcheck había terminado, el ambiente
obligó a la banda a iniciar el show y comenzar a prender al público con la
perfecta combinación de covers para recordarles a todos aquellos asistentes que
su adolescencia había terminado.
La banda Broken Window originarios de Morelia
con sus integrantes: David Ruíz (vocales), Zuriel Quintana (bajo), Armando
González (batería), Víctor Hernández (guitarra) lograron tocar una mezcla de
subgéneros tales como Indie Rock, Rock and Roll, Rock Alternativo, Rock En Español,
Oldies y grandes tributos. En sus palabras, se consideran un grupo que
promociona el talento moreliano, busca amenizar la mayor cantidad de lugares
que se les sean viables y conectar a las personas por medio de la música para
pasar increíbles momentos. Cosa que lograron al punto de demostrar un respeto
hacia la esencia de algunas de las canciones que marcaron toda una generación.
Con canciones como “Creep” que hicieron a todo
presente dejar la charla de lado y cantar a todo pulmón ese famoso coro,
pasaron a ritmos skatos como con “All the small things” para recordarnos
nuestros tiempos de rebeldía y si hablamos de rebeldía podemos mencionar a
“Gimme the power” de Molotov que llenó al público de euforia y enseguida los
hizo gritar con orgullo un: ¡Viva México cabrones! con todo y chela en mano. 
En un cierto punto de la noche, la música hacía
vibrar el lugar. Pasadas las 12:30, las últimas canciones sonaban y la gente se
iba despidiendo de aquellas melodías y recuerdos que los marcaron alguna vez.
Broken Window bajó del escenario con todo el
ánimo, saludaron a unas cuantas personas y siguieron cheleando; algunas
personas ya cansadas iban desocupando las mesas después de demostrar que la
escena local sigue presente.
Fotografía y reseña por: Alan Solchaga y Brenda Jara.
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