1er Aniversario 4.20: RUDE BOYS!
SKA REGGAE FEST - 4.20 ORG.
Sábado 25 de
junio en Zapata Bar, fecha y lugar en que se llevó a cabo la gran fiesta con
motivo del primer aniversario de la organización Cuatro Veinte.
Después de
que la organización se viera en la necesidad de cambiar lugar y hora del
evento, ya no había nada que evitará que realizaran este gran show, el cual
dejo una gran satisfacción a todos los asistentes.
La
organización cumplió con todas las características importantes para cualquier
show de este nivel, tenían gran personal de seguridad, pero en ningún momento
el público se vio hostigado por ello, solamente cumplían con revisar a todo al
que entrara al lugar.
También se
contó con gran equipo de sonido, con lo cual mantenían el público animado con buenas
canciones de reggae y dubwise entre los momentos de espera que pasábamos entre
banda y banda, además, el servicio de la barra con precios comunes; en fin,
desde el comienzo se denoto que tendríamos un buen show gracias a la
organización.
Siendo las
ocho con diez de la noche, comenzaba la primera banda.
SKAMBALACHE.
Para cuando
Skambalache se estaba preparando aun teníamos algo de la luz de tarde, se veían
algunos chavos, muy chavos, sentados delante de la banda.
En cuanto la
banda con ya larga trayectoria comenzó con sus buenas rolas fue evidente la
buena calidad de sonido, tanto de la organización como obviamente de los
músicos. Músicos que llevan demasiado en el ámbito del ska core y que han llegado muy lejos con Skambalache,
lo cual hace parecer curioso que ellos hayan sido los elegidos para abrir este
show, pero en palabras de los integrantes de la banda que lo tomaron con gracia
y la mejor actitud, sólo se puede decir que “son las politícias de la empresa”.
Durante las
primeras tres canciones aún había un ambiente tranquilo, ya que todo el público
que eran unas ochenta personas, bailaban solamente desde sus lugares. Sin
embargo, en cuanto comenzó la cuarta canción el slam comenzó, ¡y qué manera de comenzar!
Había niños, mujeres y adultos bailando con bastante energía.
Para cuando
el excelente setlist de Skambalache había llegado a un poco más de la mitad,
los asistentes ya eran aproximadamente unas 200 personas, rápidamente se hizo
notar el apoyo que hay en Morelia hacia la cultura del ska y el reggae.
Cuando la
banda finalizo sus canciones, la gente les pidió a gritos una más, a lo cual
respondieron con un cover de la Sekta Core, “Desfile Infernal”; con ello
demostraron que prendieron súper cabrón el show que apenas comenzaba.
Ya había
transcurrido alrededor de una hora después de que había terminado el turno de
Skambalache y aún no comenzaba la segunda banda de la noche. Recordé que la
última vez que pudimos ver a The Skautomatiks, hubo el mismo detalle, así que
las circunstancias apuntaban a que se debía a que ellos eran los siguientes.
La gente se
demostraba impaciente mientras chiflaba y abucheaba a los ingenieros de sonido
que al parecer eran los responsables de la tardanza, pero a ellos no les parecía
preocupar mucho.
SKAUTOMATIKS.
El show de
los Skautomatiks al fin comenzaba, en punto de las diez de la noche comenzaron
con su presentación musical. Al principio el público aún se demostraba un poco
desesperado, sin embargo, iban contagiándose con la buena música y mejoraban
los ánimos, incluso se escuchaban aplausos entre cada silencio.
Pero los
problemas del sonido continuaban para la banda, que lamentablemente se vieron
forzados a repetir la segunda canción ya que al comienzo de esta, el micrófono
del vocalista no estaba encendido, esos del audio parecía que se estaban
luciendo.
Sin embargo,
una vez que estos detalles técnicos dejaron de estar presentes, la banda
comenzó a sonar y lucir bastante bien, ya que también traían una buena actitud
mientras interpretaban sus canciones de ska reggae.
Cuando sonó
la tercera canción que tenía un ritmo más rápido que las dos primeras, se soltó
un slam súper cabrón que de repente lucia muy agresivo, pero digno del gusto de
los partícipes del mismo, el cual se mantuvo de esa manera gracias a la buena
ejecución de Los Skautomatiks.
MACEHUAL.
Para que
comenzará el turno de Macehual tuvimos que esperar menos tiempo, fueron
prácticamente 20 minutos, ya que su primera canción comenzó en punto de las
11:20.
Con los
integrantes de Macehual, fue evidente el hecho de que mantienen una conexión
bastante fuerte entre ellos, ya que antes de empezar a tocar se abrazaron
formando un semicírculo y parecía que se daban algunas palabras de entusiasmo
para dar un gran show, y efectivamente, lo dieron.
Como las dos
bandas que estuvieron antes, Macehual demostraba tener una excelente propuesta
musical y además de ello, el cantante que usa una máscara bastante colorida,
marca mucha identidad para la agrupación.
A diferencia
de Skambalache y Skautomatiks, Macehual además de contar con la alineación
básica de una banda de Ska que sería guitarras, bajo, tres instrumentos de
aire, batería y cantante, ellos también contaban con percusionista. El cual
aportaba unos ritmos bastantes buenos.
Aunque el
slam tardó un poco en re iniciar, el ambiente era bastante bueno, y una vez
comenzado, se veían aún más mujeres entrando con todo al baile.
El ska punk/reggae de
Macehual terminó justo a la media noche. Lo cual daba lugar a la primera banda
foránea.
LEONES NEGROS / ATLETAS CAMPESINOS
Lo siguiente
era algo un poco peculiar, ya que se trataba de dos proyectos por parte de los
mismos músicos. Leones Negros y Atletas Campesinos, estos músicos originarios
de Querétaro, al parecer decidieron que para tocar Ska y Reggae, podían darse
el lujo de cambiarse el nombre para cada género; dando así como resultado dos
excelentes agrupaciones que ya son de antaño.
Estas bandas
tenían un ska reggae bastante genuino, no todos logran transmitir la “vibra
positiva” como ellos lo hacían. Ellos también contaban con músicos que se
hacían cargo de las percusiones, dando una gran complementación musical a su
sonido.
La primera
mitad de estos proyectos fue utilizada para comenzar con lo más tranquilo, el
reggae, que a pesar de que era algo muy relajado, se mantenía bastante bien el
ambiente, después se elevó más la intensidad con la segunda mitad donde comenzaron
a interpretar sus rolas de ska.
Mientras
Atletas Campesinos y Leones Negros tocaban, entre el público se veía ondeando una
gran bandera con los colores del reggae y la cara de Bob Marley; eso le dio un
toque muy especial a la presentación de estas bandas.
La noche ya estaba llegando a sus altas horas y algunos ya lucían cansados, así que decidían irse a los cuartos de al lado del espacio de las bandas para sentarse y descansar un poco, al menos hasta que se llegara la hora de la banda estelar de la gran noche.
Atletas
Campesinos y Leones Negros acabaron su participación faltando unos diez minutos
antes de las dos de la mañana; afortunadamente ya no teníamos que esperar demasiado entre
el final de una banda y el comienzo de la otra; por lo cual ya todos estábamos entusiasmados
para ver a Los Rudos.
LOS RUDE BOYS.
Los Rude Boys
estuvieron listos rápidamente para comenzar su actuación, habría sido sólo un
poco después de las dos de la mañana cuando sin previo aviso comenzó a sonar “El
Precio del Sudor”.
En ese
momento, todas las personas dejaron de lucir cansadas, pareciera que la tocada
acababa de comenzar justo al momento de que los Rude Boys lo hicieron. De nuevo
el baile y la alegría se habían impuesto en el ambiente del lugar; los Rude
Boys no eran la excepción, ya que bailaban con gran entusiasmo mientras tocaban
cada una de sus canciones, canciones que todos coreaban a todo pulmón, no hubo
una canción donde la gente no ayudara a Fego, el vocalista, a complementar los
coros.
Además de la
gran calidad musical que la banda tenía, algo que se hizo notar fuertemente fue
la buena onda de todos los músicos, especialmente la de Fego, que claro, siendo
el vocalista de la banda era a quien la gente más aclamaba.
Era fácil
percatarse de que Fego y el resto de Los Rude Boys conectaban miradas, puños y
sonrisas con el público. E incluso intercambiaba pequeños diálogos con cada uno
de los chavos que se aceraban a pedirle alguna canción o simplemente para
decirle algo al gran frontman de Los Rudos.
Además de
este gesto, al igual que Leones Negros, Los Rude Boys se preocupaban por las
consecuencias que pudiera ocasionar el slam, ya que el vocal les pidió que en el
caso de que alguien cayera, lo levantarán inmediatamente, que todos se cuidaran
mutuamente y siguieran con la diversión sin que nadie saliera lastimado.
Uno de los
momentos más especiales de la noche fue cuando tocaron “A los caídos”, canción
que varios habían pedido a gritos desde el comienzo, con esta rola se veía una
gran multitud bailando en círculo al ritmo del grandioso ska nacional.
Ya cuando el
show estaba por finalizar, un entusiasta y ebrio fanático se acercó con su
celular a grabar una rola de los rudos, cuando Fego se percató de ello, le
quito el celular, por un momento creí que se habría molestado porque la gente
no los dejaba de grabar, o fotografiar, como yo, por ejemplo.
Sin embargo
Fego había tomado el celular de esta persona para grabarse mientras seguía cantando
y mientras se acercaba al resto de sus compañeros de banda para hacer tomas más
cercanas y geniales; con lo cual le ayudo a este fanático a hacer un video
genial y bastante especial, su cara de agradecimiento y felicidad decía más de
mil palabras, detalles como estos marcan la excelente actitud de estos músicos.
El concierto
terminó un poco después de las tres de la mañana, hacía mucho tiempo que no salía
de un show a una hora tan alta, pero lo valió, los organizadores del evento hicieron
un buen trabajo, esperemos que haya más eventos como estos, ya que nos
demostraron que tienen bastante potencial.
Gracias a la
Organización 4 Veinte por hacer este show y a todo el público que sigue asistiendo y hace posible
la realización de este tipo de eventos.
Fotografía y Redacción: Ricky Nava Ochoa.

